JUEGOS CLASICOS

Crea muchas figuras locas combinándolas como quieras. También puedes copiar las figuras del tangram tradicional con un nivel de dificultad superior. Desarrolla la creatividad, la coordinación ojo mano, y la orientación espacial.

Tablero de parchís y oca de madera para 4 jugadores de 33x33 cm. Incluye accesorios. Un juego para ayudar a desarrollar aspectos cognitivos cómo la orientación espacial, el razonamiento y la concentración. Edad recomendada: +6 años.

Hasta 4 jugadores, con 3 niveles de dificultad. Lanza el dado y trata de resolver la figura del nivel de dificultad que te indica el dado. El más rápido ganará.

Clásico juego de la Oca con un gran tablero de juego de 100 cm x 100 cm de plástico resistente. Ideal para jugar tanto en interior como en exterior.

El tradicional Juego de la Oca con nuevas ilustraciones diseñadas por Amélie Videlo para Djeco. Gana el primero que llega a la casilla 63. Durante el camino habrá casillas que te hagan avanzar, retroceder, perder turnos... Contiene: un tablero de juego, 4 fichas y 2 dados. Dimensiones de la caja: 38*16*3 cm Recomendado a partir de los 5 años. Tiempo estimado de la partida: menos de 20 minutos.

El tradicional juego chino que consiste en crear formas reconocibles a partir de las 7 figuras básicas que aporta. Ideal para estimular la creatividad y favorecer la estructuración espacial. Fabricados en plástico muy resistente, irrompible.

El clásico Rummi pero ahora en formato viaje, para que puedas llevarlo donde quieras con su práctica caja en metal. Sencillo y apasionante juego en el que cada jugador debe tratar de combinar sus fichas en grupos de tres o más para conseguir 100 puntos lo antes posible. Versión hasta 4 jugadores.

Un juego educativo de manipulación en el que los niños tendrán que reproducir combinaciones utilizando fichas de madera.  Después de elegir una tarjeta “Modelo”, el niño debe seleccionar las piezas de madera correctas e insertarlas en el soporte para recrear con precisión la secuencia de colores de la tarjeta escogida. Pero cuidado, ¡la tarea no es tan sencilla como parece! Las piezas de madera presentan imágenes ligeramente distintas del anverso y en el reverso, lo que añade una dimensión extra al desafío. Esto anima a los niños a mejorar sus habilidades de observación escogiendo las formas correctas y superponiéndolas al orden correcto para recrear la secuencia exacta. Edad: 3 años.